Más allá del entender que el optimismo en la vida es una elección (personal y colectiva), es un camino; preocupa el abordaje casi sin contenidos de esta mirada "optimista".
Los problemas ambientales no inmovilizan, al contrario movilizan, si no nos movilizamos ante todas las injusticias que pasan en el mundo, pues, o somos necios o estamos muertos en vida.
¿Es que pensar y actuar frente a los problemas ambientales es malo?
¿Y no pensar en problemas es bueno? ¿Bueno para quién? ¿Para los que sufren las problemáticas? ¿O para los poderosos que las causan?
No confundamos optimismo con esperanza
La lucha por transformar este mundo injusto se vive con esperanza siempre, no con positivismo de oficina.
El ambientalista, o sea, el ser humano sensible hacia los atropellos hacia los hombres y al planeta, debe dejar el discurso, debe salir de la burbuja del "todo bien" y embarrarse y luchar por transformar esta realidad.
"Todo hombre verdadero debe sentir en su mejilla el golpe dado a cualquier mejilla de otro hombre". José Martí
Juan Cruz Mendía
Noviembre de 2012
1 comentario:
Yo no me había dado cuenta que cuando se trabaja en educación ambiental o comunican temas de ambiente se disimulan los problemas. Pero ahora que usted lo dice me doy cuenta que es muy cierto. Hace poco estuve en el parque nacional iguazu (cataratas, argentina) y me impresionó mucho un cartel que decía que el agua de las cataratas hace 50 años era clara y transparente (hoy es marron rojiza, muy oscura) y que eso ocurre porque se ha desmontado la selva nativa por el avance de la agricultura (soja) y entonces el agua arrastra sedimentos que antes retenían las raíces del bosque.
Me sorprendió que un tema tan delicado no estuviera mas explicado, con mas detalles. Y sí había muuuchos otros carteles contando las maravillas del parque.
Podría subir algo de esto?
Muchas gracias!!!
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