La naturaleza de Nietzche

Habla el solitario. - Después de mucho hastío, desaliento y fastidio - tal como los produce necesariamente una soledad sin amigos, sin libros, sin obligaciones y sin pasiones -, cosechamos, a modo de recompensa, un cuarto de hora del más profundo recogimiento en nosotros mismos y en la naturaleza. El que se resguarda totalmente contra la naturaleza se resguarda también contra sí mismo: jamás le será dado a beber de la copa mas deliciosa que pueda llenarse en su recóndita fuente.
Aforismo 200


La naturaleza olvidada. - Hablamos de la naturaleza y, al hablar de ella, nos olvidamos a nosotros mismos; pero nosotros también somos naturaleza, quand même (1). Por consiguiente, la naturaleza es cosa completamente distinta de lo que pensamos al hablar de ella.

(1) En Francés, en el original. Significa: "De todos modos".
Aforismo 327

La Naturaleza no da saltos. - Cualquiera que sea la rapidez que pueda alcanzar el hombre, y aunque parezca pasar de una contradicción a otra, al contemplar las cosas más de cerca, descubriremos, sin embargo, las piedras de base que constituyen el paso del antiguo edificio al nuevo. Esta es la tarea del biógrafo: debe razonar sobre la vida conforme al principio de que la Naturaleza no da saltos.
Aforismo 198




Friedrich Wilhelm Nietzsche 
El viajero y su sombra (1880)
Editorial Edaf, 1999.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sumo al post una anécdota de los últimos años de la vida de Nietzsche extraída de la novela "La insoportable levedad del ser", del escritor checo Milan Kundera:

Nietzsche sale de su hotel en Turín. Ve frente a él un caballo y al cochero que lo castiga con el látigo. Nietzsche va hacia el caballo y, ante los ojos del cochero, se abraza a su cuello y llora. Esto sucedió en 1889, cuando Nietzsche se había alejado ya de la gente. Dicho de otro modo: fue cuando apareció su enfermedad mental. Pero precisamente por eso me parece que su gesto tiene un sentido más amplio. Nietzsche fue a pedirle disculpas al caballo por Descartes. Su locura (es decir, su ruptura con la humanidad) empieza en el momento en que llora por el caballo.

Anónimo dijo...

el antropocentrismo cartesiano (el hombre como centro del mundo) va a llevar al hombre al centro de la mierda del culo del mundo