El Ambiente en la Cultura II - Aymaras/quechuas

En las culturas aymará y quechua, La Pachamama (Madre Tierra) es la diosa suprema, es considerada como madre que da la vida, alimenta y resguarda.
Las celebraciones a la Pachamama incluyen el respeto por todos los seres vivientes, por cuanto ellos no solamente son el fruto de su creación sino que forman parte de ella misma.

Ayllus: El concepto ayllu es la unidad primaria de las sociedades quechua y aymará. Siendo la comunidad la primer y única unidad de existencia.


“Somos comunidad con los hombres y con la madre tierra. El ayllu es el espacio de vida en el cual nos desarrollamos como seres en la comunidad cósmica”.


Abbia Yala: Es el nombre dado por la cultura aymará y quechua al continente, hoy denominado, americano.

Ciudad de Machu Picchu (Montaña Vieja), Cuzco, Perú. Juan Cruz Mendía 2006.


La Wiphala es el símbolo de identificación nacional y cultura de los pueblos andinos, es el emblema de la nación colectiva y armónica.os como seres en la comunidad cósmica”



El Ambiente en la Cultura - El sintoismo


Nuestra concepción de ambiente tiene que ver con un proceso de construcción cultural. Es decir que cada pueblo y cada cultura tienen su propia percepción del ambiente, vinculada a saberes, creencias y prejuicios.
Nuestra manera de concebir el mundo es nuestra manera de percibir el ambiente, y en consecuencia, nos rige la manera de actuar sobre él.

EL SINTOISMO
El sintoísmo es la religión nativa del Japón. Sus principios no se oponen al
Budismo por lo que se profesan en la isla ambas religiones.
El shinto tiene varias acepciones, se lo conoce como “El camino de los
Dioses”, el culto a los Kami (espíritus o deidades japonesas) y en su forma
más profunda es un culto de la Naturaleza.


Los orígenes del sintoísmo se remontan a la edad antigua como culto a los fenómenos naturales (las tormentas, las montañas, el Sol, la Luna o los ríos), que los creyentes identificaban con los kami. La Diosa Segen-Sama,
diosa del monte Fuji, es uno de los kami más venerados.

Existen en la naturaleza infinidad de deidades o espíritus, y la vida humana se halla íntimamente vinculada a sus pensamientos y acciones. La religión sintoísta es una combinación de adoración a la naturaleza y culto ancestral.

Santuario Sintoista Heian Jungu, Kyoto, Juan Cruz Mendía. 2007